Terminábamos nuestra entrada anterior saliendo de GULFOSS, la cascada de oro, el tercer punto clave del famoso Círculo Dorado islandés. La segunda jornada nos llevará a la costa sur de la isla, a visitar algunas de las cascadas más conocidas y fotografiadas del mundo. Y mucho más después de servir de escenario de lujo para la famosísima serie "Juego de Tronos". Más de uno reconocerá alguna de nuestras imágenes. Primero, SELJALANDSFOSS, famosa porque se puede caminar por detrás de la cortina de agua, y todo un reto para nuestros fotógrafos. Se ve desde la Nacional 1, y en verano, a su alrededor, los campos están verdes como en la primavera de España...
Segundo, SKOGAFOSS, también visible desde la carretera, tan solo unos kilómetros más allá. Con su precioso sendero que permite subir a verla desde arriba, y conocer el río donde tiene su origen, e incluso, si tenemos tiempo y energías, iniciar uno de los trekkings más famosos del mundo, desde aquí a LANDMANNALAUGAR, lugar del que seguramente os contaré más cosas, un poco más adelante...
El tiempo todavía no es radiante, aunque ya no llueve, e incluso quiere salir el sol. Nuestra siguiente parada será una escala técnica en VIK, para reponer energías nuestras y de nuestros vehículos. Y pronto seguiremos a los acantilados de DYRHÓLAHEY, donde nos espera el arco de roca que la niebla nos deja ver por un instante, y también otra de las principales atracciones de la naturaleza en Islandia: las famosas y fáciles de fotografiar colonias de FRAILECILLOS ATLÁNTICOS, tan simpáticos ellos...
Y si todo nos parece poco, todavía la tarde nos dejará tiempo para visitar REYNISFJARA, la playa de guijarros negros, con sus características formaciones de basalto que nos recuerdan, más que ningún otro elemento, el origen volcánico de esta tierra. Un nuevo paraíso para el fotógrafo, con decenas de propuestas como los paisajes clásicos, pero también el retrato, la búsqueda interior (gracias Hemi), la búsqueda de texturas en las rocas...
Y nos queda aún una última sorpresa para terminar el día: conducimos una hora hacia el interior para llegar a nuestro alojamiento de esta noche, uno de los sitios favoritos de fin de semana, e incluso de veraneo, de los propios islandeses: el campamento en el valle de THAKGIL. Aquí nos acogerán unas encantadoras cabañas d e madera, aunque el "comedor social" es una enorme cueva donde cabemos todos para la cena...
Creo que no podemos quejarnos de la jornada que hemos pasado. ¿Quedarán más sorpresas escondidas en esta pequeña isla del Atlántico?
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